Hay muchos hitos que experimentar durante los primeros años de vida de un niño. Ir al dentista no es algo en lo que la mayoría de los
padres piensan mucho hasta que llega el día.
¿Cuándo es el momento adecuado?
La mayoría de los profesionales dentales coinciden en que un niño debe acudir por primera vez al dentista alrededor del año de edad, o alrededor del momento en que le sale el primer diente. Esto ayuda al dentista a revisar las cosas temprano para evitar problemas en el futuro, crear una relación con el paciente desde pequeño y ayudar a establecer las visitas al dentista como parte de la rutina normal del niño.
Preparando a su hijo para el gran día
Los niños tienden a sentirse ansiosos cuando creen que sus padres están ansiosos, así que no le dé mucha importancia a la primera visita al dentista de su hijo. Claro, habla de ello con ellos, pero no te emociones demasiado y ten cuidado con las palabras que utilizas al
describir la visita. Nunca digas "no dolerá". Eso sólo creará una expectativa de que así será.
A continuación se ofrecen algunos consejos para prepararse para el gran día:
Lleve a los niños pequeños a la oficina con sus hermanos mayores. De esa forma el entorno les resultará más familiar.
Practica abrirte de par en par frente a un espejo. A los niños les encanta presumir, así que explíqueles que el dentista quiere ver sus hermosos dientes.
Lea un libro una o dos veces que explique una visita al dentista con su hijo unos días (o semanas, ¡o ambos!) antes de la visita.
Esté tranquilo y despreocupado cuando conduzca hasta la oficina para su cita. Sea puntual, pero no llegue demasiado temprano para evitar tener que esperar demasiado.
La mayoría de los dentistas infantiles tienen salas de espera llenas de juguetes, libros, videojuegos, etc. Permita que su hijo explore. Esto ayudará a aliviar el estrés y hará que la cita sea más divertida.
En CASADENS, entendemos que prepararse usted y su hijo para una experiencia tan importante puede parecer estresante. Al atender a pacientes jóvenes y en crecimiento, sabemos exactamente cómo hacer que su primera (y posteriores) visitas sean lo más fáciles y agradables posible. Asegúrese de hablar con nuestro personal sobre lo que puede hacer para que la primera visita al dentista de su hijo sea lo más tranquila posible.
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